“En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme…” Existe un campo de golf del que debemos cuidarnos, no nos dejemos engañar por sus exiguas dimensiones, porque se esconden trampas y engañifas que podrían confundir al propio hidalgo Don Quijote que confundió molinos por gigantes.
Ahí nos presentamos 14 valientes caballeros en busca de aventuras, no para salvar a damiselas en apuros, sino para salir airosos con pares y bogey.
Un día nefasto para un servidor que sólo pudo hacer de fiel escudero para los valientes que me acompañaban, Don Miguel marqués de Carnero, Don José María Hidalgo de la ilustre familia de los Sanjurjo y Don José capitán de Navío.
No así para la dama Adriangela Dornaleteche (este apellido tan ilustre viene de serie y no ha sido necesario adornarlo, je je) que con brío y maña obtuvo 41 puntos, el caballero Tales Azzoni que viajó desde las antípodas obtuvo una recompensa de 30 puntos scratch, y el caballero Antonio López obtuvo un premio par 3 en el hoyo 7.
Afectísimo y seguro servidor se despide hasta la próxima aventura, esperando tener más fortuna y tino.